Descripción
En julio de 2002 anunciaron un nuevo cambio de sello, esta vez a Rough Trade Records, firmando un contrato de cuatro álbumes, y en 2003 lanzaron nuevo trabajo, Dear catastrophe waitress, producido por Trevor Horn, que fue nominado para los premios Mercury Music de 2004. Se trata del álbum con mayor abundancia en texturas, con el sentido melódico más variado y rico de su trayectoria y con un plausible trabajo de Horn en producción y arreglos, profuso en detalles y opulencia sonora. Aunque las canciones de Belle & Sebastian se habían convertido en relativamente habituales en las emisoras de radio británicas, aún les quedaba por pegar con fuerza en el mercado estadounidense.
El álbum mostró un sonido notablemente más “producido” en comparación con sus primeros cuatro discos, ya que la banda estaba haciendo un esfuerzo concertado para producir más música de “apta para la radio”, y atesoraba grandes canciones como Step into my office, baby, Dear catastrophe waitress, Stay loose, You don’t send me, Lord Anthony o Asleep on a sumbean. El álbum tuvo una acogida calurosa y se le atribuye la restauración de la “acreditación indie” de la banda, y marcó el regreso de Murdoch como compositor principal del grupo, tras el mal recibimiento de Fold your hands, you walk like a peasant y Storytelling, que eran trabajos más colaborativos del grupo.
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